Las mujeres son el soporte de la sociedad. Cuando una mujer desarrolla su inteligencia emocional, puede gestionar mejor los desafíos que se le presentan, ya que aumentan la empatía, la escucha activa y las habilidades sociales, lo que conlleva mejores relaciones en los espacios en los que se desenvuelve y de esta manera puede sostener asertivamente a su familia y a los miembros de su comunidad.

En Colombia 40,7 % de las mujeres son cabeza de hogar; lo que significa que, además de ser las responsables de sostener económicamente a la familia, sobre ellas recae también la responsabilidad de acompañar a los hijos, en muchos casos, también a sus padres y deben velar por el bienestar de cada uno de ellos.  Cuando cuentan con herramientas que les permiten gestionar su inteligencia emocional, adquieren habilidades con las que pueden afrontar los retos que se presentan a diario con consciencia, asumiendo la responsabilidad que tienen como miembros de una sociedad.

Uno de los compromisos de nuestra fundación es evitar la discriminación. Sabemos que antes que ser hombres o mujeres somos seres humanos, Por esa razón, nuestros servicios los pueden recibir personas de cualquier género, creencia, visión política, raza o posición socio – económica y cultural.

Nuestro primer acercamiento es a través de líderes comunitarios, quienes nos informan sobre las necesidades de su comunidad y con base en esta información diseñamos las actividades que más se adecúen para lograr un acompañamiento más positivo.

Nuestra fundación necesita de tu apoyo. Tus habilidades y conocimientos son valiosos para impulsarnos a llevar nuestra misión a muchos lugares de Colombia y Latinoaméríca.

Si eres estudiante, puedes realizar tus prácticas sociales con nosotros.

Tu experiencia y tus conocimientos nos permitirán avanzar con mayor eficiencia y eficacia.